¿Porqué será? Que cuando se aproxima el mes de septiembre los espereños sentimos una cosa interior que nos hace recordar las fiestas de nuestro Santo Cristo.

¿Por qué será? Que los espereños que están ausentes y no pueden estar el día del patrón en su pueblo, es el día que peor pasan del año por no poder estar con su Cristo y con su gente.

¿Por qué será? Que Espera tiene muchas fiestas durante el año pero la de su patrón es la que viven los espereños con más emoción.

¿Por qué será? Que el niño que ha nacido en Espera, su Cristo lo lleva durante toda su vida en lo más hondo de su corazón.

¿Por qué será? Que en las angustias y dificultades, los espereños nos acordamos de nuestro Santo Cristo, para pedirle su protección.

¿Por qué será? Que por muy lejos que se encuentre un espereño, jamás se olvida de su patrón, el Santo Cristo de la Antigua.

¿Por qué será? Que a pesar de los siglos y los cambios que han sucedido en las personas por los distintos acontecimientos políticos, la fe en su Cristo nunca cambió.

¿Por qué será? Que cuando llega el mes de septiembre el pueblo de Espera se encuentra con más visitantes que todos los meses del año.

¿Por qué será? Que los espereños hemos tenido la suerte de tener por patrón al mismo Cristo Crucificado, sabiendo que en la mayoría de los pueblos tienen a una virgen por patrona.

¿Por qué será? Esa pregunta me la he hecho muchas veces.

¿Por qué será? Solo Dios lo sabe y es lo que tenemos que agradecer por habernos concedido ese privilegio.

A la memoria de Mario Garrido Troncoso (mi tío) por haber sido muchos años presidente de la Hermandad del Cristo de la Antigua.

El día 5 de abril del presente año nos ha dejado, los espereños nunca lo olvidaremos porque nos dejó un buen legado de sus dotes poéticas.

Esta poesía se la dedicó a nuestro Santo Cristo de la Antigua: